sábado, 31 de diciembre de 2011

2012

Un año más. Me parece increíble. Ha sido rápido y a la vez lento. Es curioso como las cosas han cambiado.
Mi primera ruptura. Tenía ya nuevos amigos. Conocí a más gente. Me volví a enamorar. Me fui a Alemania. Volví. Segunda "ruptura". Malos rollos. Verano. Arreglo de amistades. Inglaterra. Vuelta. Conocer más gente. Enfadarme con otros tantos. Obsesiones. Primer rollo. Italia.Vuelta. Ruptura rollo. Enfados. Conocer a nuevos amigos. Enamorarme de nuevo. Echarle huevos. Iniciar una segunda relación. Amigos. Arreglar cosas. Fin.
Eso es más o menos un breve resumen con los detalles importantes. 
He empezado este año como una Patricia totalmente distinta a la que he terminado siendo al final. He madurado mentalmente y he retocado y reafirmado mis principios, opiniones, creencias... Pero sigo teniendo la misma esencia interior. He empezado este año con un grupo de amistades totalmente distinto al que he terminado teniendo. Entre medias ha habido varios. Es increíble el transcurso de las cosas, como se van desarrollando. Es como una ola. Se forma por el viento hasta que choca con el fondo y rompe el círculo, llega a la playa y tras lamer la orilla retorna. Creo que ha acabado en mejor pues, los buenos amigos se han quedado y los que no eran tan buenos, han sido sustituidos por otros que están en prácticas. Es parte de la madurez, o eso creo yo.
Tengo mucho que agradecer, muchos nombres y poco que decir por no caer en redundancia. Agradezco de corazón a aquellos que están ahí y espero que ahí sigan. 
Feliz 2012, el último año de nuestras vidas.

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